Todos sabemos lo que el destino tiene guardado para las páginas de enlaces a contenido pirata o protegido por derechos de autor. El cierre, las multas, las penas de cárcel… son prácticas habituales tanto en Europa como en otras partes del mundo. Sin embargo, nos ha sorprendido conocer que en Japón la cosa no es así. En el país del sol naciente no es ilegal enlazar a contenido pirata, pero pronto todo cambiará con una nueva legislación y hasta 5 años de cárcel.

Aunque parezca mentira, en Japón no es ilegal enlazar a contenido protegido por derechos de autor. Este vacío legal podría cambiar muy pronto ya que el gobierno nipón lleva varios meses trabajando en este problema para terminar con la piratería online. No es la primera vez que han intentado enmendarlo, pero sí parece que será la definitiva.

Japón planea ilegalizar los enlaces a contenido pirata

El pasado mes de septiembre se propuso al gobierno japonés la ilegalización de los portales que ofrezcan enlaces a contenido pirata. Con la legislación actual, estos portales no infringen ningún tipo de ley al no tener el contenido almacenado en sus servidores y en su lugar enlazar únicamente.

A diferencia de lo que sucede en Europa que se persigue a estos portales de enlaces a contenido pirata que intentan obtener un beneficio económico, en Japón no existe una ley de este tipo. Se estima que existen más de 200 portales que se benefician de este vacío legal, por lo que una ley contra su existencia podría reducir drásticamente las cifras de piratería del país asiático.

La idea es criminalizar el acto de enlazar de forma consciente a contenido que infringe los derechos de autor. Los dueños de los derechos de ese contenido podrán pedir la retirada inmediata de los enlaces. En caso de no atenderse su petición, se aplicarían importantes sanciones.

Estas podrían llegar hasta a penas de cárcel de 5 años en las situaciones más graves. La propuesta final de la ley se presentará en 2019, aunque mientras tanto se trabajará en un sistema de bloqueo de contenido alojado fuera de las fronteras de Japón y que vulnere los derechos de autor.

Resulta curioso que una economía como la japonesa no tenga penalizado en enlace a contenido pirata, algo que ha reducido notablemente las tasas de piratería en otros países (además de la llegada de nuevas plataformas legales de contenidos del estilo de Netflix en series o Spotify en música).