El apoyo al Bitcoin por parte de empresas privadas, y del sector público en diversos mercados, es lo que ha impulsado a la criptomoneda hacia su situación actual. Arrancó el año a un valor de apenas 1.000 dólares, y la evolución en 2017 ha sido constante. La previsión hace apenas unas semanas es que alcanzase los 10.000 dólares en diciembre, pero lo hizo en noviembre y este último mes del año ya vale más de 15.000 dólares.

La situación del Bitcoin parece la ideal, y sobre todo para los inversores de comienzos de 2017 y anteriores. En cuestión de meses se ha multiplicado por 15 su valor en el cambio al dólar, pero este destacable crecimiento está provocando miedo en el sector privado que apostó por la divisa virtual como moneda de pago. Los primeros en retirar su apoyo, entre las grandes empresas, han sido los de Valve. Ahora, Steam ya no acepta la divisa virtual como forma de pago por la alta volatilidad de la criptodivisa y el riesgo que esto supone para la tienda de videojuegos para PC más popular de todo el mundo.

Steam abandona el Bitcoin y roban 70 millones: ¿es oro todo lo que reluce?

En junio y julio se produjeron dos fuertes caídas en el precio del Bitcoin respecto al dólar estadounidense por los movimientos en China. Pero a pesar de esto la evolución es positiva: a comienzos de año el Bitcoin estaba por debajo de los 1.000 dólares, y a comienzos de diciembre del mismo año se han superado los 15.000 dólares y todas las expectativas sobre la divisa virtual. El hecho de no estar respaldado es lo que ha facilitado su rápido crecimiento a lo largo de estos meses, pero es lo que también podría dar lugar a un desplome imprevisible.

En las últimas horas no sólo se ha dado el máximo por encima de los 15.000 dólares, y también la retirada del apoyo de Steam, sino que también se ha producido un robo de 70 millones de dólares en Bitcoin por el hackeo a Nicehash. Esta compañía se abrió en el año 2014, y ofrece una aplicación para escritorio para que los usuarios puedan minar la criptomoneda desde sus dispositivos. Algo que, aunque debería haber repercutido su valor frente al dólar, parece no haber dañado al Bitcoin.