Cuando navegamos por Internet podemos encontrarnos muchas amenazas que comprometan nuestra seguridad y el buen funcionamiento del equipo. Existe una gran cantidad de páginas webs de todo tipo, pero como podemos imaginar no todas ellas son seguras. En este artículo vamos a explicar cómo podemos detectar si una web es un fraude en realidad. Señales que nos alertan de que hay que tener cuidado al navegar por este sitio y qué podemos hacer para protegernos.

Cómo detectar si una web es legítima o es un fraude

Observar bien la URL

Una de las primeras cosas a tener en cuenta es observar bien la URL. En ocasiones los ciberdelincuentes utilizan ataques phishing que simulan ser una página legítima. Sin embargo estamos ante un fraude que realmente tiene como objetivo hacerse con las credenciales de la víctima.

Hay que mirar bien el nombre de la dirección. En ocasiones aparecen pequeños detalles que delatan que realmente estamos ante un fraude. Por ejemplo nombres con alguna letra cambiada, algún guión o alguna parte de dominio modificada. Buscan que a simple vista parezca la página original, pero realmente no lo es.

Tener cuidado de dónde proceden los links

Podemos acceder a una página a través de un link que nos llegue por algún medio. Hay que tener cuidado de la fuente real de ese link. Por ejemplo si es a través de un correo sospechoso, que no conozcamos el remitente o en alguna página que no nos inspire confianza.

Puede que estemos ante una web fraudulenta que realmente pretende redirigirnos a un espacio infectado y que comprometa nuestra seguridad. Siempre que nos lleguen correos de Spam o intentos de phishing, lo mejor es ignorarlos y nunca abrir ningún tipo de enlace que contenga.

Mirar bien el aspecto de la web y posibles errores

A veces los ciberdelincuentes simulan muy bien las páginas que quieren imitar. Sin embargo suelen dejar algunos detalles descuidados. Quizás malas traducciones de textos, iconos mal colocados o un aspecto en general que invita a pensar que esa página no es legítima.

Hay que observar bien la página en sí, la estructura que tenga, así como la información que ofrece. También detectar posibles enlaces o contenido que no esté relacionado con la página en sí.

Cifrado de la página

El cifrado de una página es muy importante. Siempre que naveguemos por páginas HTTPS significa que nuestros datos viajan de manera cifrada. Si por ejemplo vamos acceder a una web de un banco, antes de introducir nuestras credenciales hay que fijarse bien que estamos ante una página cifrada.

En caso de encontrarnos con que funciona en HTTP puede ser un indicativo de que algo raro hay. Una web en la que tenemos que introducir datos sensibles siempre tiene que estar en HTTPS.

Consultar en Internet

En caso de dudas cuando llegamos a una página web en la que queremos comprar un producto, por ejemplo, siempre podemos consultar en Internet. Podemos buscar comentarios de otros usuarios que puedan advertir sobre problemas en el sitio. Es una manera de asegurarnos de que una web que visitamos es segura.

En definitiva estos son algunos aspectos que debemos de tener en cuenta a la hora de navegar y asegurarnos de que una página web no es un fraude.