En la lucha contra la piratería, la compañía de Mountain View juega un papel de máxima relevancia con su motor de búsqueda Google. Está considerado como una de las ‘puertas de acceso a Internet’ y sin error alguno, por los millones de usuarios que lo utilizan a diario. Es por eso que Google recibe millones de peticiones cada año para solicitar la retirada de ‘contenidos ilegales’, que de esta forma no desaparecen de Internet, pero sí dejan de estar indexados en su motor de búsqueda. ¿El problema? Que quienes lanzan estas peticiones no analizan contra quién las hacen.

Desde tiempo atrás Google actualiza de forma periódica un informe sobre peticiones ‘antipiratería’, y en él se puede ver la amplia labor de ‘limpieza’ que la firma de Mountain View lleva a cabo desindexando contenidos que infringen en diferentes países la normativa de derechos de autor y propiedad intelectual. En estos informes se pueden revisar detalles como la cantidad de peticiones, la cantidad de organismos que lo llevan a cabo, y por supuesto contra quién están dirigidos. Hay mucha más información como, por ejemplo, el volumen de indexación sobre el dominio al que le afecte al menos una petición ‘antipiratería’. Pero ¿tiene sentido todo esto?

Algunas peticiones ‘sin sentido’ entorpecen la lucha contra la piratería de la mano de Google

En el informe en cuestión, y con los datos más actualizados, podemos comprobar que hay peticiones contra portales web ‘inactivos’. No por el volumen de subida de contenidos, que sí se actualiza de forma regular, sino por la cantidad de usuarios que los visitan, que según los datos públicos más fiables es prácticamente cero. Es el caso, por ejemplo, de mp3toys.xyz, un dominio que según los datos de Google ha recibido solicitudes de retirada por más de 50 millones de enlaces por un total de 37 organizaciones diferentes, que protestan por la infracción en contra del 605 autores.

Este portal, en su punto de ‘máxima audiencia’ alcanzó los casi 200.000 usuarios. Un extraño pico que se redujo a 15.000 visitas en sólo un mes, y actualmente está por debajo de los 1.000. Evidentemente, esto ya supone un problema para los que velan por los derechos de autor, pero el contrapunto está en que recibe más protestas que rapidgator, por ejemplo, así como otros muchos portales con un volumen de visitas infinitamente superior. Con este tipo de solicitudes, las organizaciones encargadas de ello sólo están entorpeciendo las labores de Google en la retirada de enlaces.